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Vacuna leucemia Felina

La leucemia vírica en los gatos se transmite a través de diversas formas de interacción, como el contacto con la saliva del animal infectado o durante el parto de una madre contaminada.

Este virus puede causar neoplasias en aproximadamente el 30% de los gatos infectados y puede contribuir al desarrollo de otras enfermedades infecciosas o provocar anemia. Su efecto más común es la inmunosupresión, afectando al sistema inmunológico y a la médula ósea del gato. Esto deja al gato vulnerable a una amplia variedad de enfermedades e infecciones secundarias.

 

Es crucial entender que, a veces, los gatos infectados pueden parecer saludables. Por ello, es fundamental realizar un diagnóstico mediante la detección del antígeno, especialmente al introducir un nuevo gatito en el hogar. La prevención de esta enfermedad se basa principalmente en la inmunización durante los primeros meses de vida del gatito y debe mantenerse a lo largo de toda su vida adulta.

Los gatos se contagian de las siguientes maneras: 

  • Lamido y acicalamiento entre ellos

  • Compartir bandejas sanitarias o camas

  • Compartir comederos o bebederos

  • Heridas por mordeduras

 

 Lamentablemente, no existe un tratamiento específico para esta enfermedad, y solo se pueden tratar y aliviar los síntomas en los gatos afectados para mejorar su calidad de vida.

La vacuna contra el virus de la leucemia felina (FeLV) es la medida de prevención más importante y efectiva.

Precio: 38€

¿Es necesario hacer el test de leucemia antes de vacunar?

Si tu gatito es un cachorro y va a recibir su primera vacunación, es importante verificar si ya está infectado con el virus. En caso de que provenga de un criadero oficial y serio que tiene a todos sus gatos protegidos y testados regularmente, entonces se podría vacunar directamente.

El test de inmunodeficiencia y leucemia detecta la presencia de estos virus, que pueden causar una supresión del sistema inmunológico. Si existe la posibilidad de que tu gato haya estado expuesto a alguno de estos virus (de vacaciones por ejemplo, o de visita en una casa con acceso al exterior), es crucial realizar el test antes de administrar cualquier vacuna.

Vacunar a un gato con virus de inmunodeficiencia o leucemia conlleva riesgos, ya que la vacuna puede no ser efectiva y, lo que es más importante, puede tener un impacto negativo en el sistema inmunológico del gato.

Test rápido (resultado en 10min) : 35 euros

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